Un cuento infantil para enseñar a leer

enseñando con tarjetas de letras y palabras

Los cuentos infantiles son una herramienta importante para ampliar el vocabulario, fomentar el desarrollo del lenguaje y la lectura en niños con DEA (dificultades específicas del aprendizaje). Los cuentos pueden ayudar a los niños a mejorar su comprensión de lectura y su capacidad para retener información y nuevas palabras.

Contar cuentos facilita la retención

Los niños con DEA olvidan con facilidad lo que logran leer. Crear cuentos cortos de su imaginación a partir del cuento que acaba de leer, los ayuda a retener un poco. Por ejemplo, podrían preguntarse sobre los personajes, el escenario o la trama. También pueden incluir actividades como dibujar una imagen de su personaje favorito, crear su final alternativo o hacer un collage basado en el cuento. Otro tipo de actividad relevante para los niños con DEA serían las de asociación, que ayudan a los niños a mejorar su habilidad de retención de palabras nuevas para ampliar su vocabulario visual.

Cuentos, preguntas y comprensión

Para los niños con DEA, por sus dificultades lectoras que los lleva a concentrarse en decodificar las palabras, se hace necesario crear actividades de algún tipo para favorecer su comprensión, una de ellas son las fichas de preguntas. Estas pueden ser especialmente beneficiosas porque les brindan un enfoque estructurado y más accesible para abordar la lectura. En lugar de simplemente leer un cuento y esperar que los niños comprendan todo, las fichas de preguntas les dan un punto de partida con preguntas específicas y tareas a realizar.

Cuentos y fichas Estrategias de motivación

Además, las fichas de preguntas relacionadas con los cuentos infantiles pueden ser una forma efectiva de motivar a los niños a leer. A muchos niños les encanta la fantasía y la imaginación de los cuentos infantiles, por lo que, si se les presenta la oportunidad de profundizar en esos mundos imaginarios a través de preguntas y actividades, es más probable que se comprometan y disfruten del proceso.

Las Fichas Recursos de evaluación

Otra ventaja de utilizar fichas de preguntas, memoria, asociación, silabarios, otros, relacionados con cuentos infantiles es que pueden ser una forma efectiva de medir el progreso de los niños en su comprensión de lectura y retención de información. Al hacer preguntas específicas y hacer que los niños realicen actividades relacionadas con el cuento, los padres y los educadores pueden evaluar mejor lo que los niños han aprendido y en qué áreas necesitan más ayuda.

En conclusión, las actividades de comprensión, asociación o memoria son una herramienta valiosa para mejorar la comprensión de lectura y la retención de información en niños con DEA. Cuando se combinan con cuentos infantiles, pueden ser especialmente efectivas para motivar a los niños a leer y profundizar en su imaginación. Además, las fichas de lectura relacionadas con cuentos infantiles también pueden ser una forma efectiva de medir el progreso de los niños en su comprensión de lectura y retención de información. Aquí un VIDEO CUENTO "El Pollito pío Chillón Llorón" para la práctica de las habilidades lectoras

Cuento infantil con rimas: El pollito pío chillón llorón

Había una vez un pollito chillón llorón

Que siempre se quejaba y lloraba sin razón

A todo el mundo quería acusar

Y nunca se cansaba de hablar

Cada vez que su mamá lo dejaba solo

Empezaba a chillar como un loco

Lloraba y lloraba sin parar

Y a su mamá no dejaba de molestar

El pollito Chillón llorón tenía seis hermanos, por lo que la Mamá Gallina a veces tardaba en hacerle caso. Pero él había descubierto el sistema infalible para que le atendieran pronto y el primero.

El pollito Chillón montaba unos berrinches tan espantosos que su madre lo dejaba todo para ir a ver cuál era su emergencia.

- ¡Píío, píío, píío, socorro, ven!

¿Qué pasa, Chillón?

- Que alguien se ha comido mi maíz.

- ¿Y nada más? No quiero que me asustes por tonterías, puedes ir cerca del saco y así picoteas lo que se le ha caído al granjero. ¡Que sea la última vez que me preocupas tanto por tan poco!

Pero Chillón seguía alarmando a su madre por los motivos más insignificantes.

¡Mamá, como así! ¡Atiéndeme, no me dejes así

Pero su mamá siempre le decía:-"Tranquilo pollito pío chillón, llorón, no te quejes más por cualquier bobería y déjame hacer mis cosas"-

- ¡Pío pio, mamá ven de prisa, auxilio, socorro! - ¿Qué ocurre pollito? - Que Pimpollito me ha insultado y me ha dado un picotazo. - Y para eso, ¿tanta urgencia? - decía la madre - ¡anda, haced las paces e iros los dos a nadar al estanque!

Un día el pollito decidió escapar

Y en el bosque se fue a aventurar

Pero cuando llegó la noche

Se sintió solo y sin reproche

Empezó a llorar y a chillar

Pero nadie le vino a consolar

Se dio cuenta de que la atención

No siempre llega en cualquier ocasión

Al amanecer encontró el camino y regresó con su mamá. Y prometió que no volvería a llorar ni irse de aventura.

Pero tan pronto se reunió con sus hermanos

todo empezó a ser fastidioso

lloraba y se quejaba

con su mamá, muy lloroso.

"Pimpollito me pellizcó"

gritaba con desesperación

"Piolín me miró feo"

era su lamentación.

"Pluto me guiñó el ojo"

dijo con gran aflicción

"Pío lito se comió mi gusanito"

su voz era un lamento sin razón.

Una larga retahíla

de quejas y de dolor

era su triste historia

que contaba con gran ardor.

Pero mamá gallina, cansada ya

de oír su llanto y su queja

no le prestaba más atención

a su interminable aflicción.

Así que el pollito pío chillón llorón

dse quedó solo en su confusión

sin darse cuenta que la solución

estaba en cambiar su actitud y su visión.

Un día, la mamá estaba hablando con otras gallinas en un corro y oyó al pollito gritar llamándola, pero pensó que sería cualquier bobada y no se inmutó. Entonces, Chillón tuvo que ir corriendo donde estaba su madre, para decirle que había fuego en el granero. Las gallinas pudieron avisar al dueño de la granja, que afortunadamente llegó a tiempo de apagarlo.

El pollito pío, tras superar su espanto,

aprendió a no asustar sin motivo ni llanto,

y a no quejarse por cualquier cosa en su canto.

Entendió que ser el centro de atención en cada instante,

no era importante y lo hizo brillar radiante.

Así, el pollito pío chillón y llorón,

dejó de ser un problema en cada ocasión.

Actividades de comprensión

Procedimiento: Si el niño lee, o está en el proceso de aprendizaje, se le pide que seleccione la ficha de respuesta, de lo contrario, la escucha y elige la opción correcta. Ya con la práctica lectora, a futuro se le pide al niño que reconozca la ficha correcta