De estudios psicológicos y educativos se conoce que los niños desde los 2 años son capaces de prestar atención de forma selectiva y desatender aspectos no importantes, y al paso de los años van mejorando su capacidad de dirigir y controlar voluntariamente su propia atención con la ayuda de sus padres y maestros.
¿El ejercicio mejora la atención selectiva?
Se presume que los ejercicios pueden ayudar a mejorar la atención, pero la disfunción cerebral en los disléxicos no permite regularizar los procesos y se debe recurrir a ellos de manera continua, no en sí al ejercicio como tal, sino a cómo proceder para asegurarse de estar atento y que se está teniendo acceso a la información de forma correcta, ya que si no se está prestando atención el individuo no estará consciente de esa falta, a menos que se le supervise, haga seguimiento continuo y aprenda a monitorearse.
La atención selectiva normal y en disléxicos.
Los estudios que se han realizado hasta los momentos han explorado el desarrollo de la atención selectiva en niños de diversas edades. En estos estudios se les ha planteado a los niños la tarea de comparar qué pares de dibujos son iguales. Y de sus resultados se ha reportado que, a partir de los 6 años, los niños son capaces de examinar de forma sistemática y planificada los dibujos, asegurándose a cada momento de no olvidar los dibujos identificados y no cometer errores. Por debajo de los 6 años, se ha observado que los niños trabajan de forma espontánea, sin precisión ni planificación previa.
El niño con dislexia tiene una evolución cognitiva igual a todos, sólo un poco más tardía y lenta, con el agravante que la disfunción cerebral siempre estará interfiriendo en el control y regulación de la atención y el aprendizaje instrumental, sin embargo, no se descarta que puede aprender estrategias metacognitivas para autocontrolar y autorregular de manera activa y continua su atención.
En la actualidad los estudios continúan y los nuevos hallazgos pueden sostener o descartar estas afirmaciones encontrando nuevas relaciones o elementos intervinientes y concomitantes. De todos modos, siempre estamos atentos en actualizar la información aquí contenida.
La capacidad de control de la atención selectiva se puede observar en el niño mientras se encuentra dedicado a una actividad o tarea y podrá determinarse el grado de severidad del problema.
Si el niño es capaz de mirar atentamente una película de su agrado y luego contar con detalles algunos episodios, se puede pensar que su atención selectiva está funcionando lo suficientemente bien almeno para las imágenes visuales y el recuerdo auditivo, pero en cuanto a la lectura se debe recordar que el disléxico tiene un déficit fonológico para los signos gráficos que interfieren en su aprendizaje y alteran su atención.
Importancia de las estrategias metacognitivas
La meta a largo plazo de aprender a ser metacognitivo es saber utilizar cada estrategia para una variedad de tareas y para la solución de problemas.
Si el facilitador ha detectado que el niño tiene fallas continuas de atención, por supuesto se lo comunica al niño y le enseña y modela estrategias que deberá aprender y recordar para ponerlas en práctica y autocontrolar su atención. La meta a corto plazo es hacer que el niño con dificultades de aprendizaje llegue a ser un buen procesador de la información.
El proceso de aprendizaje metacognitivo se inicia siguiendo algunos pasos básicos:
- Identificar el problema, reconocer la existencia del problema y definirlo con precisión en qué consiste y cómo se manifiesta en uno mismo.
- Seleccionar las estrategias pertinentes para la solución o control del problema.
- Representar la estrategia en todos sus detalles y modelarla para conocerla
- Elaborar la estrategia con todos los pasos a dar y en la secuencia adecuada
- Identificar los recursos y tiempo que se va a dedicar a cada uno de los pasos del plan con el fin de optimizarlo
- Control de la solución, este consiste en revisar lo que se ha hecho, lo que se está haciendo y lo que se debe hacer, al mismo tiempo que se vigila si las habilidades que se están utilizando permiten aproximarse a la solución.
- Evaluar los resultados que se van obteniendo, prestando atención al feedback interno como externo
Una explicación más sencilla del proceso sería identificar el problema juntamente con el docente, éste le explica y modela cómo autocontrolarse y monitorear su actuación. El niño aprende a monitorear su actuación y antes de aparecer el problema, deberá darse auto instrucciones orales que deberá obedecer para controlar que no se vea inmerso en el problema, la idea es controlarlo a tiempo y evitarlo.
Por ejemplo, si el docente observa que el niño se mantiene constantemente distraído, se lo hace saber y juntos elaboran un plan para que el niño logre estar atento en tanto sea necesario. En este plan la solución consiste en monitorearse constantemente, estar alerta en mantenerse atento e ir dándose auto instrucciones en voz baja que encaucen la atención hasta el momento que sea necesario. El objetivo es evitar distraerse lo menos posible y lograr el control voluntario. La técnica es efectiva y se puede aplicar a distintos aspectos personales.
Ejercicios de comparación de iguales
Los ejercicios de comparación e identificación de iguales son una opción informal para estimular, autoevaluarse y evaluar la atención selectiva de los niños y su capacidad para sostener la atención el tiempo que sea necesario hasta concluir la tarea.
Los puzles son también una buena opción para ayudar a sostener la atención y concentración, de igual modo estimulan la percepción visual y las habilidades de análisis y síntesis.
Una vez completado el ejercicio, pulsa en el botón "Terminado", luego en "Comprobar mis respuestas" y allí puede visualizar sus logros y en la ficha se verán resaltados los errores.
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